“Com ho fa el vent, és així com jo vull viure. Com ho fa el vent, el vent que es mou i que és lliure entre la gent.” (“Com ho fa el vent”)
El tercer trabajo largo de Joan Manuel Serrat salió a finales de 1968. Vio la luz después de todo el affaire eurovisivo con lo cual Serrat empezó a notar la presión del régimen franquista. Es sistemáticamente vetado por los medios del franquismo. Pero sin gozar de la difusión de otros artistas, su popularidad en vez de decaer crece enormemente consiguiendo que este «Con Ho Fa el Vent» (Edigsa, 1968) entrara en la lista de ventas españolas.
Es el primer álbum de uno de los períodos más importantes en la carrera de Joan Manuel, los dos siguientes años serían decisivos para que se convirtiera en lo que es actualmente. Otro hecho importante es la aparición como arreglista definitivo de Ricard Miralles, un tándem que durará muchos años y que funcionará a la perfección. El trabajo salió sin nombre y se le conoce por el tema que lo abre “Com ho fa el vent”
Y precisamente este tema con su apenas minuto y medio es toda una declaración de principios. «Com ho fa el vent» es un canto sobre la libertad, sobre sus ansias de independencia y de no someterse a ningún tipo de encorsetamiento. Una perfecta respuesta a todo lo que estaba sucediendo alrededor suyo. Serrat cantan con contundencia su propio sentir en esos tiempos tan convulsos. Esta fuga también está presente en “En qualsevol lloc” y como en aquélla se espera siempre una vida mejor.
En este álbum nos podemos encontrar con auténticos clásicos del cancionero serratiano. A la ya mencionada «Com ho fa el vent» podemos unir «Paraules d’amor«. Para muchos considerada como la mejor canción de amor del noi del Poble Sec. En ella nos habla del despertar sexual, del primer amor adolescente, de ese beso robado,… y todo sin que sobre nada de una canción pluscuamperfecta. Tierna y bella sigue emocionando desde el primer día. Con un regusto más agrio nos deja Serrat en “De mica en mica” o en “Saps”.
Otra curiosidad que encontramos en este álbum es la primera mujer de Serrat, metafóricamente hablando, y es “Marta”. Un nombre del que le hablan “Les llargues nits sense lluna, les ones i cadascuna de les llums que hi ha en el mar”. Posteriormente llegarán las más conocidas «Lucía» o «Penélope«. Otro personaje serratiano es “La Carmeta”, prostituta solitaria que sólo le acompaña un perro tan viejo como ella. Este tema es un fiel reflejo del barrio chino y del paralelo barcelonés de la época que es tocado a ritmo de jazz y charlestón.
Para cerrar el disco, Serrat se guarda los temas que hurgan su pasado. “Camí avall”, tema que ahonda en las heridas de la Guerra Civil, en un retrato civil de ese sinsentido. En los otros dos rememora sus tiempos en el Pirineo, toda una exaltación de la belleza del campo, un sentimiento que aparecerá repetidamente en su cancionero. Así tenemos “L’Olivera” y la maravillosa “Cançó de matinada”, un perfecto cierra para un álbum sobresaliente.