Versión briosa del “Tallahassie Lassie” de Freddy Cannon que a España llegó de la mano de los mexicanos Los Locos del Ritmo. Fuerza y desparpajo a raudales a pesar de una acompañamiento que no es el más adecuado. Ontiveros ataca literalmente la canción y logra una interpretación vocal realmente rocker. Aún más fuerte puede resultar el “Oye niña” o “Let’s dance” que por entonces triunfaba en la voz de Chris Montez con el inicio de una batería frenética y la continuidad de un riff de órgano bailón y contagioso. Ontiveros se va a lucir aquí también como solista de guitarra. Dos de las mejores canciones a ritmo de twist jamás compuestas, aquí llevadas con acierto a la meta del baile.
“A New Orleans” fue una canción de repertorio muy conocida en su época y también grabada por solistas similares como Baby, Alberto o Franciska. En ningún caso superaron la original de su creador Adriano Celentano.
La sorpresa más agradable del disco es precisamente su único tema melódico. Una canción de origen sudamericano, que primero grabó Luis Aguilé y cuyos derechos adquirió Zafiro para que sus artistas Luis Gardey y Ontiveros la versionaran. Los apuntes de vibráfono y saxo en la instrumentación le sientan muy bien. Una melodía agradable y un estribillo pegadizo que acaban por configurar un vinilo cargado de frescura y ganas de abrir puertas en el escurrido panorama discográfico español de 1963.