Este LP es consecuencia del triunfo de Polansky y el Ardor en el II Concurso de Rock de la Diputación de Madrid. El encargado de llevar a buen puerto este álbum fue Paco Trinidad (ex bajista de Ejecutivos Agresivos) en uno de sus primeros trabajos como productor (antes tan solo había producido unos maxis de Décima Víctima) y fue grabado en estudios Kirios durante varias noches de octubre y noviembre del año 1982.
El propio productor recuerda aquella grabación: “También fue mi primera grabación en un estudio grande. Se me hacía todo muy extraño. Los instrumentos no sonaban como yo estaba acostumbrado, todo era muy grande, realmente no me sentía capaz de hacer sonar al grupo con toda la fuerza que ellos tenían en directo. Felizmente, me ayudaron todos a conseguir un gran disco”.
Pulir el tosco estilo de Polanski y sus tres compañeros no debió resultar tarea fácil. La guitarra suena ahora con claridad y los ritmos están bastante más trabajados que en las maquetas. La voz suena un poco menos cavernosa y con un buen efecto de eco. En general, da la impresión de unos sucios punkis recién salidos de un baño de espuma y el grupo se aleja de la oscura onda The Cure que hasta entonces habían mantenido. Con todo, el resultado de esta grabación en conjunto es más que aceptable a pesar de su irregularidad, alternando algunos temas sencillamente magníficos con, todo hay que decirlo, otros francamente mediocres.
En la grabación participaron varios músicos invitados como Carlos Torero, por entonces en Espasmódicos (batería y percusión) y Enrique Sierra (guitarra de Radio Futura).
Pocas veces se ha escuchado en la música española una canción más apocalíptica que “Las venas de mi amigo están ardiendo”. En este temazo la música se adecua a la letra de forma perfecta creando una desasosegante sensación en el oyente. Vuelven a su temática preferida; las consecuencias irremediables de los enfrentamientos bélicos para las personas corrientes. También “Cielo rojo sobre Poznan” y por supuesto “Ataque preventivo de la URSS” inciden en el mismo asunto. Fue grabada posteriormente en una digna versión por El Niño Gusano.
Me gusta la sencilla, inesperada y larga introducción instrumental de “El espía”, con letra evidentemente basada en la novela de John Le Carre y posterior película: “El Espía que Surgió del Frío” (Martin Ritt, 1965). Una canción casi desconocida del repertorio de Polanski que os animo a escuchar, pues creo que os llevaréis una agradable sorpresa.
«Chantaje emocional» es otra de las piezas fuertes del grupo desde sus inicios y da título a este único larga duración. Incluida en su primer maxisingle y regrabada para este LP constituye la segunda canción más famosa de su repertorio. Aquí debemos fijarnos en el papel del saxo tenor presente en todo el tema y en la voz premeditadamente monótona de Victor.
Otras canciones remarcables son “La negra”, que no es otra cosa que “Y no usa laca”. La pretendidamente grandiosa “Cruzando el Rubicón” con la que se abre el álbum y, por supuesto, la archiconocida “Ataque preventivo de la URSS”.
El resto baja un tanto en su calidad resultando en algún caso un relleno aburrido y repetitivo. De todos modos, es un LP cargado de detalles que merece ser escuchado completo.
Como nota curiosa, indicar que en la portada de este LP y de los dos singles que de él se extrajeron, el nombre Polansky figura con y griega.