“Casta Viva” (CBS, 1977) significó el adiós a la música de las hermanas Muñoz; un adiós prematuro pero casi inevitable, ya que tras el lanzamiento de éste, su cuarto álbum, se juntaron demasiadas cosas como para poder continuar. El despido de su promotor las complicó mucho más de lo que pensaron, y tampoco ayudo nada que este álbum fuera un fracaso, hablando en términos comerciales.
En un intento por congraciarse de nuevo con el gran público se da la espalda al camino que se había empezado a recorrer en “Tercer Álbum” (CBS, 1976) y se vuelve a los orígenes; o eso se pretendió, aunque el primer paso dado fuera en falso, ya que el primer single lanzado para promocionar este álbum no resiste la comparación con los demás primeros singles del dúo.
¿Es esto extensivo al resto del disco? La respuesta sólo puede ser no, ya que hay suficientes temas como para dar empaque a un álbum. Así, podemos encontrarnos con “Mentira y nada más”, que injustamente fue relegado como segundo single; “Sola”, la canción que más se acerca a sus años dorados, o “Sé que llorarás”, donde rescatan el lado más orgulloso de Las Grecas. Si a estos temas les hubiesen acompañado trallazos sonoros del calibre que fueron en su día “Te estoy amando locamente” o “Yo no quiero pensar” seguramente hubiéramos disfrutado de más años y más discos de Las Grecas, pero desgraciadamente no fue así ya que el mayor problema del disco es la falta de esas canciones inmediatas que enganchan al oyente.
Por supuesto también hacen versiones, las incluidas aquí son “Nadie te quiere ya”, original de Los Brincos, y “Dame veneno” de Los Chunguitos, que poco antes habían vendido cincuenta mil copias del single que contenía dicha canción, siendo mucho mejor la segunda que la primera.
Pero la cruz del disco se la lleva la balada “Kassartili”, que, sin ser mala, la verdad es que no pega demasiado con el espíritu del disco y su ubicación tampoco ayuda a cambiar de opinión. Parecido le ocurre a la instrumental “Gitana”, se hace raro y un poco incomprensible que en Las Grecas haya un tema de estas características, y su continuación “Dime qué te pasa” donde se echa de menos que no canten ambas al unísono.
Para reconciliarnos con ellas acaban con “Hace frío ya”. Versión del tema «Ma che freddo fa» que inmortalizó la cantante italiana Nada. Donde por última vez las podemos escuchar juntas y, despidiéndose, nos recuerdan que “Lo que es la vida si no hay cariño, es como el árbol que sin hojas se quedó, es como el viento, el viento frío que deja triste y solitaria la ciudad. Y qué es la vida, qué es si no estás tú.”