Bizirik

Es mucha ya la experiencia acumulada por Kaleko Urdangak a lo largo de los más de 10 años que llevan funcionando; muchos los discos editados, los eventos organizados y proyectos gestionados para mantener la escena del punk Oi! vasco activa y dinámica. Tienen pues ya galones suficientes como para dedicar una de las canciones de su último disco a hacer un ejercicio de memoria de lo que fue la escena de Bardulia. Lo hacen tejiendo la letra con algunas partes tomadas de cancions de algunos de los grupos de todo aquel movimiento. Cuentan además para ello con la ayuda de componentes de Doubling BoysAñade este contenido, Orreaga 778 y ErasokaAñade este contenido. Si ya hicieran un ejercicio de tender puentes con la generación del rock radikal vasco, cuando invitaron a Fermín Muguruza para un cameo en aquel «Biolentzia 1984», resultaba del todo lógico hacer un gesto similar para esta otra escena guipuzcoana.

Es este «Bardulia» uno de los 10 temas que componen el nuevo trabajo de los vascos, para el que han tenido el diseño de Ramón GD ART para la portada, que muestra la liberación de las cadenas que aprisionan. Cadenas de las que, como dicen en «Etengabe aurrera», se sacuden para seguir adelante aprovechando el viento a favor. Abren el disco con un himno con el que celebrar la década que llevan «sirviendo a su manera» a su pueblo, apoyándose en los cuatro acordes y sacando las fuerzas de donde haga falta. Kaleko Urdangak siguen depurando la composición de canciones con épica contando con melodías poderosas de guitarra y la voz rugosa de Aritz acorde con los cánones del género.

Grabado en los estudios Gárate de Andoain (Guipúzcoa) asistidos por Kaki Arkarazo, con «Txotx!» incluyen un interesante divertimento, en el que narran una comida de la cuadrilla en una sidrería, con todo el desplazamiento en autobús estando de gaupasa. La canción está ejecutada en clave jocoso con un toque incluso rural en su música. Algo así recuerda al acercamiento de bandas como Kortatu o Baldin Bada trikitixa en mano para su punk rock.

Amantes de la tradición, o al menos sospechando de los cambios que vacían los barrios de siempre, empapan algunas de sus letras con referencias a la historia de su tierra haciendo incluso memoria de caídos en la lucha armada o protestando por cuestiones de la lengua.

En lo musical, muestran su cara más dura y rocosa en momentos como «Noraezena» y «Buruz behera» para terminar con el mismo tono desplegado en el comienzo con «Aberria».

Kaleko Urdangak siguen efectivamente avanzando a toda vela empujados por el viento.