Cuando Bruno Lomas no tenía claro qué hacer grababa un disco de rock and roll y el resultado era infalible. Gracias a este sencillo, el público joven va a descubrir al veterano rocker. Ambas canciones, que ya habían sido grabadas en otras ocasiones por el cantante, están soberbiamente interpretadas y grabadas, aunque fue la cara B la que más se escucha por radio.
Un disco que congració al cantante con sus antiguos seguidores y que obtuvo un número de ventas nada desdeñable entre los jóvenes, llegando a situarse durante bastante tiempo en el top 20 nacional. Y es que el rock and roll clásico es un recurso que nunca le falló a este cantante.