Después del monumental escándalo ocurrido el año anterior -que ya ha quedado explicado en la biografía- lo que menos le apetecía a María y Mayte era grabar un nuevo disco juntas. Pero contractualmente estaban obligadas a hacerlo y hubieron de hacer de tripas, corazón y apechugar con la imposición de RCA, que tenía mucho de castigo a las que habían sido su ojito derecho.
Los arreglistas, compositores y productores habituales con Rolf Soja a la cabeza escapan del asunto y las Baccara fueron puestas a las órdenes de Graham Sacher, que compuso todas las canciones y produjo el disco. Una de sus componentes cuenta que las sesiones fueron tortuosas, sin hablarse una con otra y con nulas ganas de hacer un buen producto, a pesar de los importantes medios técnicos y musicales puestos a su disposición.
Peor aún fue la breve campaña de promoción con coreografías sin ensayar y cada una yendo a su aire en el escenario y manteniendo entrevistas por separado. La crítica puso el disco a caldo, hasta el punto que RCA renunció a editarlo en algunos países, entre ellos Gran Bretaña. Tampoco el forzado cambio de imagen que parece querer transmitir la portada ayuda mucha, pues las Baccara convertidas en chicas callejeras malotas resultaba bastante increíble.
Musicalmente se trata de un producto de pop ramplón con ciertos elementos lejanamente hispanos, profusión de sintetizadores y suspiros marca de la casa, que a estas alturas parecían semejar más un bostezo que una provocativa invitación.
Escuchado en la distancia que conceden los muchos años, quizá pueda decirse que no es tan malo como muchos, incluidas sus propias intérpretes, pretendieron en su momento. Desde luego cabia esperar mucho más del dúo, sobre todo después de su “Colours” (RCA, 1979), pero tampoco es el bodrio que se ha pretendido, a veces sin siquiera escucharlo.
La canción que se eligió para su promoción fue “Colorado”, un tema que no aguanta comparación con sus viejos éxitos y que vuelve a ahondar un tanto en la vena hispana del dúo y que contiene un pegadizo estribillo.