Como “Hay que Lavalo” (CBS, 1975) funcionó bien el año anterior, para la campaña de verano de 1976 se puso a la venta este sencillo extraído del único LP del trío. La elección es bastante feliz dentro de lo que había, pues se trata de las dos canciones más logradas de toda la trayectoria de este peculiar grupo. Dos canciones, además, de ritmos muy distintos entre sí, aunque con la misma idiosincrasia en sus letras y voces. El disco volvió a subir al top 10 y no hubo aquel año chiringuito playero o fiesta popular donde no sonara su marchosa cara A.
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