“Ahora confío en la sorpresa”.
En los tiempos que corren la autoedición ha dejado de ser un remedio para convertirse en una realidad cada vez más seria y pujante, tenemos muchos ejemplos, desde Vetusta Morla a formaciones con menos impacto comercial pero de exquisita factura como los ferrolanos Quant o precisamente los coruñeses Nouvelle Cuisine, que aquí nos entregan su primer trabajo en largo tras cuatro maquetas. Un trabajo del que no vendieron miles de copias pero que hizo feliz a más de uno con su pop cálido y evocador.
Entre los doce cortes del álbum nos encontramos con su versión del “Pandeirada” de Andrés do Barro que forma parte del disco homenaje al músico ferrolano “Manifesto Dobarrista: Un Disco Tributo a Andrés do Barro” (Falcatruada, 2007).
Un CD que es una obra de artesanía tecnológica y que sale al mercado en tiradas de venticuatro CD cada uno de ellos numerado. Para su creación utilizan DYMO y los títulos los componen mediante una imprenta portátil.
Abre “Galileo” con una suavidad melancólica que evoca pasajes presididos por el sol del mediodía. Un acercamiento a La Buena Vida que no debe engañarnos. “Aritmética polar” podría llegar al corazón de cualquier fan de Love Of Lesbian y en “Mapa” las guitarras ganan en contundencia y se aproximan a Los Planetas.
Un piano preside la enigmática “Dos torres” y las guitarras afiladas de “La fuga”, planificando maniobras de escapismo que consigan llevarnos lejos de aquí. La dulzura evocadora vuelve con los tintes acústicos de “El regalo” y “François”.
Con la ilusión intacta un año después llega su siguiente trabajo, también autoeditado, “De Memoria” (Nouvelle Cuisine, 2008).