“Quiero cambiar las normas, no me gustan / Quiero elegir yo siempre primero“.
El primer larga duración del trío barcelonés Aias es un estallido lo-fi de alta calidad mezclado con buenas dosis de pop sixtie, distorsión y ruido. En él nos encontramos melodías contagiosas que inducen a ser silbadas, armonías vocales brillantes y varias capas de reverb. Su sonido recuerda a formaciones como Sibyl Vane -inevitable-, Vivian Girls, Brilliant Colours, Grass Widow o Best Coast.
Doce canciones grabadas con la ayuda de Cristian Pallejà –Nisei, Sedaiós-, quien además añade la trompeta en algunos cortes. Elena, compañera de Gaia en Sedaiós, aporta el saxo.
Abre la luminosidad melancólica de “Tu manes“, un corte precioso y emocionante en el que las armonías vocales son las protagonistas. En “Quan tornis demá” y “Món inventat” –fantásticos los coros redentores y sus tintes sixties- repiten esquemas luminosos y vitalistas. De entrada estos primeros cortes se saborean como un dulce enrarecido, la producción lo-fi y el ruido controlado esconden voces e instrumentos de manera premeditada. Tras varias escuchas en la boca sólo queda un regusto cálido y azucarado que nos deja con ganas de más, de mucho más.
Mención especial merece “La truita“, una de las mejores composiciones del disco. Tintes garage, punk y pop envueltos en una densa capa de caramelo. Marc Parramon se encarga de la realización del vídeo del corte, con grafismo y animaciones de Aleix Abellanet y con la postproducción de Jordi Castells.
Tampoco debemos pasar por alto “Dues pedres“, escrita pensando en el “Chanson des vieux amants” de Jacques Brel entre deseos de envejecer junto a la persona querida, dudas e inmensas preguntas.