“NUESTROS 80’S. CUANDO LAS BANDAS URBANAS MORÁBAMOS LAS CALLES DE SANTA CRUZ” (LOS 80 PASAN FACTURA, 2018) EL CUARTO GATO

“NUESTROS 80’S. CUANDO LAS BANDAS URBANAS MORÁBAMOS LAS CALLES DE SANTA CRUZ” (LOS 80 PASAN FACTURA, 2018) EL CUARTO GATO

“NUESTROS 80’s

CUANDO LAS BANDAS URBANAS MORÁBAMOS LAS CALLES DE SANTA CRUZ”

EL CUARTO GATO

LOS 80 PASAN FACTURA (2018)

 

Nuestros80sLas historias contenidas en esta nueva entrega de la sección editorial de Los Ochenta Pasan Factura tienen como protagonistas a componentes de las diferentes tribus urbanas que coexistían en Santa Cruz de Tenerife (y La Laguna) en la década de los 80. Su autor, reconvertido de la lucha callejera a la escritura artística tal y como informa la solapa interior, narra sobre las vicisitudes de punks, mods, skins, tecnos, rockers y siniestros por las calles de las dos localidades vecinas, de manera que plazas, bares, tiendas de discos e incluso emisoras de radio resultarán pues familiares al lector local.

Pero más allá del simple recorrido por la geografía de la capital tinerfeña, el libro supone sobre todo una crónica de la escena musical de entonces ya que, en una suerte de efecto similar al televisivo “Cuéntame Cómo Pasó” (2001) o al cinematográfico “Forrest Gun” (1994) en los que las vicisitudes que viven los personajes se entrecruzan con hechos o eventos históricos, “Nuestros 80s” incorpora conciertos de Familia Real o Castillo Interior a las narraciones, o alude a otros grupos canarios como Escorbuto Crónico, Conemrad o Krull. Asimismo dos de las chicas protagonistas de uno de los relatos participan como público en la grabación de la actuación para televisión de los italianos Righeira.

Atractivos ingredientes que sirven como buen condimento para unas historias que igualmente atrapan por sus argumentos. Problemáticas juveniles de parejas, pandillas, familias e institutos, y en uno de los casos, el del último relato “Santa Cruz en un pañuelo“, ejercicio incluso de memoria histórica a partir de la participación de un abuelo excombatiente en la contienda fraticida de la Guerra Civil. Enmarcadas todas ellas en el ámbito de la ciudad de Santa Cruz, llama la atención sin embargo la presencia, a modo casi de fantasmagórico decorado de fondo de La Península y de Londres, como vías de escape a la a veces claustrofóbica existencia recluida en el estricto espacio insular. Así por ejemplo sirve Madrid como tierra de promisión a Betsy, protagonista de “Scooters, parkas y Northen Soul” como destino en el que empezar de verdad la vida que desea o el exilio de liberación en “La casita de las pulgas” para la madre de Lucy cuando marchó a trabajar como cocinera. Igualmente es de Londres de donde regresa Ángel en “La isla ausente” en un último e infructuoso esfuerzo por congraciarse con el padre del que escapó años atrás y que le sirve además para encontrarse con amigos y la novia que dejó al abandonar la isla.

Una atractiva propuesta de Los Ochenta Pasan Factura en su intento inagotable por completar de la mejor manera posible, bien a base de crónica o de ficción, la fotografía de la escena de aquella década en las Canarias.

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