San Felices

Segundo trabajo de Gabriel y Vencerás ahora transformado en cuarteto gracias a la incorporación a la guitarra de Juan Crespo como miembro permanente de la banda. Para su lanzamiento el grupo optó por la autoedición creando la plataforma Hermanos Segundos que en sus propias palabras es «un colectivo unido para hacer el bien. No un bien cualquiera, sino un sentimiento verdadero, humano y alentador. Porque la unión fraternal es la razón de la existencia. Porque querer es querer pero, sobre todo, porque la realidad supera la canción«. Y un proyecto de crowdfunding para la edición en vinilo de este «San Felices» (Hermanos Segundos, 2014) cuya portada es obra del pintor Javier Remirez de Ganuza.

El álbum es un gran paso adelante en la carrera de la formación ya que en el siempre difícil segundo disco consiguen superar con creces las expectativas levantadas con su debut «Ácido Niño» (Gran Derby, 2012). Su música se sigue alimentando de la sonoridad noventera pero en este trabajo presentan un álbum más compacto y homogéneo liderado por temas como «Factor amiguet«, con la que abren el disco, la retranca contenida de «Pony» o «Ballenato» el mejor de todos los cortes para el que escribe estas líneas.

Aunque no tenga temas tan inmediatos como los que nos podíamos encontrar en «Ácido Niño» (Gran Derby, 2012), este LP es un trabajo más uniforme, sin tanto altibajo, con muchos matices y que gana a cada escucha. También en parte gracias a la colaboración de Javier Vicente con la guitarra en «Funeraria risas» y los sintetizadores en «Factor amiguet«, «Wíctor» y «Siamés«, así como la de Cristian Pallejà -productor de este álbum- que aporta arreglos de teclados y trompetas.

El grupo da una mayor importancia a unas letras que en el pasado parecían secundarias. Ahora toman el protagonismo que se merecen y aparte del surrealismo que destilaban antaño ahora hay mucho humor negro. Así nos podemos encontrar desde pueblos donde se ejecutan a los neonatos («Factor amiguet«), un óbito festivo («Funeraria risas«) o unos personajes de lo más curiosos que nadie quisiera encontrarse en su vida («Sor increíble«).

«Angustias vitales en chicos normales. Frustraciones y complejos» cantan en «Páginas amarillas«, porque Gabriel y Vencerás también tienen unos miedos y ansiedades inherentes a la convivencia diaria, y éstas forman parte del discurso del cuarteto como en «Ácido niño«, un retrato un tanto melodramático del nacimiento de un hijo, o «Ballenato» y «Pony» donde cantan sobre relaciones sentimentales totalmente deterioradas.