A finales de 1968 estaba cantado que Mike iba a dejar Los Bravos para iniciar una carrera solista, que a principios del año siguiente se materializará bajo el nombre de Mike Kennedy. El sello EMI Regal recordó que en alguna parte tenía cogiendo polvo las grabaciones que habían hecho Mike & The Runaways en el verano de 1965. Tomó las dos canciones que el hispano-alemán había cantado en aquel disco y las colocó en un single, que, de esta manera oportunista, se adelantaría a las primeras grabaciones en solitario de Mike Kogel en España. La portada es un claro documento oportunista, con la cara del cantante en primer plano, su nombre en letras gordas y casi escondido el nombre del grupo del que formaba parte cuando desembarcó en España.
Dos temas llenos de ritmo primitivo que poco o nada tendrían que ver con los temas lentos con los que el cantante iba a iniciar su nueva trayectoria. Un intento de hacer caja a costa de viejas grabaciones olvidadas.