La Dificultad de Ser Normal

Cuatro años dan para mucho, sobre todo para desarrollar y evolucionar una propuesta musical. Sin notarse un cambio drástico, si que es evidente que los Kindergarten de aquí poco o nada tienen que ver con los de su anterior trabajo, volcándose del todo en su vocación electrónica, pero una electrónica más experimental, minimal y, en ocasiones, asfixiante, desde luego nada festiva y bailable, concesiones aparte, como la "Canción feliz" que abre el disco, muy funky y con ecos Stereototal. Como sabor funky es el que tiene "Brasileira" y sus sonidos… brasileiros, amable también esta, con la colaboración de Lydia Wellington.

Pero lo interesante llega con "Esquemas", una canción psicótica, repetitiva, hipnótica, que con su peculiaridad y singularidad se erige como lo más significativo y auténtico del disco, el cual sigue por estos mismos derroteros más desabridos, veáse la atmósfera hostil de "Furia genética" o lo desapacibles sonidos de "In y out" y "Japanese all-i-oli overdose", tan pegados a la era "Matrix" (Andy y Lana Wachowski, 1999) -Prodigy, Rob Zombie, etc.

Una evolución, sin duda, interesante, aunque aún por desarrollar, en la que, como se señalaba en las crónica de la época, se echaba un poco en falta cierta cohesión.