BCORE, 25 AÑOS DE ADAPTACIÓN: ENTREVISTA A JORDI LLANSAMÀ

BCORE, 25 AÑOS DE ADAPTACIÓN: ENTREVISTA A JORDI LLANSAMÀ
Tienda BCore
Tienda BCore

25 años y 270 referencias a cuestas. Parece toda una heroicidad en un país como este en el que la cultura -y menos la música- nunca ha sido prioritaria. En lo que respecta a la actualidad, ¿cómo está la salud de BCore ahora mismo?
Pues ahora mismo creo que atravesamos un buen momento. Posiblemente sea fruto del trabajo que hemos hecho durante estos 25 años. Pero creo que, aunque las ventas de discos y el negocio musical en general no está para tirar cohetes, hemos conseguido algo de estabilidad.

Empezaste haciendo camisetas, fanzines -«Lo Kurkó de les Korts», por ejemplo- y distribuyendo y vendiendo maquetas y directos de grupos punk y hardcore hasta que en 1990 editaste el disco de debut de Corn Flakes, el «No Problem» (BCore, 1990). ¿Qué conserva BCore de esos años en la actualidad?
La ilusión y las formas. Ten en cuenta que BCore durante estos 25 años se ha ido incorporando al negocio musical. Teniendo distribuidores externos, editorial externa, etc. Mucha gente de la industria nos ha dicho guapos y se ha interesado en nuestras bandas y catálogo. Pero conforme el negocio ha entrado en declive hemos sido nosotros los que nos hemos sacado las castañas del fuego regresando a nuestros orígenes. Volvemos a ser nosotros mismos los que distribuimos nuestros discos a las tiendas, etc. Me refiero a que muchas veces yo mismo, o cualquiera de la oficina, se da una vuelta por el centro de Barcelona, habla con los tenderos y les bajamos los discos. Lo mismo con otras tiendas del estado usando paquetería.

Según la biografía que se encuentra en la web, en un primer instante no había intención de seguir editando discos, ni de montar un sello discográfico. ¿En qué momento decides dedicarte por completo al sello?
Fue de una manera casi inconsciente. Al editar el primer LP de Corn Flakes tuvimos una cascada de propuestas, tanto de bandas nacionales como internacionales. Cuando recuperamos parte del presupuesto invertimos en la siguiente referencia, después en la siguiente. Y cuando nos dimos cuenta ya llevábamos cuatro o cinco editadas. Es entonces cuando vemos claro que es una cosa que va a tener continuidad. Y nos reafirmamos como sello.

En 25 años BCore habrá pasado por buenos y malos tiempos. ¿En algún momento pensaste en abandonar?
Ha habido ocasiones en las que me ha pasado por la cabeza, pero ha durado poco. Esto va con tu estado de ánimo y con tu crecimiento como persona. Y muchas veces la música va muy ligada a un movimiento generacional. De pronto tienes un montón de bandas y gente que las sigue. Y al cabo de cinco minutos, esa gente se hace mayor, las bandas se disuelven y el público se esfuma. La gente crece, se interesa por otras tendencias y todo lo que tenías montado se desmorona. ¡Hay que volver a empezar!

En el haber del sello está el apostar por bandas –Aina, Standstill, Delorean, Nisei, Sibyl VaneThe Unfinished SympathyXmilk, por ejemplo- que años después han tenido un reconocimiento tanto a nivel nacional como internacional, en algunos casos convirtiéndose en verdaderos referentes más allá del ámbito hardcore/punk.
La verdad es que esas bandas trabajaron duro y abrieron un camino que después aprovecharon otras. Siempre es así. Estás bandas no podrían haber hecho nada si bandas como Subterranean KidsL’Odi Social o Corn Flakes no hubieran marcado las rutas antes.

El lema del 25 aniversario es «25 Anys d’Adaptació», que me parece muy acertado a diferentes niveles. El primero, el más obvio, es al formato musical: la casi desaparición y el actual pequeño auge del vinilo, la irrupción del CD y ahora mismo el formato digital. En muchos de vuestros lanzamientos combináis el CD con el vinilo. ¿Cuál es vuestro formato preferido?
Es un lema que tiene una doble lectura. Nos hemos adaptado para sobrevivir, pero entre líneas puedes leer claramente que seguimos siendo unos inadaptados, unos outsiders. Estamos en un país donde muchas veces no se nos entiende y quedamos en tierra de nadie. Aquí los géneros aceptados por los medios y en consecuencia por el gran público, siempre han sido los mismos. El pop y el rock, pero entendiendo el rock como algo cercano al heavy o rock urbano. Nosotros no somos ni carne, ni pescado.

Nuestro formato favorito es el vinilo, aunque siempre nos hemos adaptado un poco a lo que mandan los tiempos. Esta claro que ahora que la música se consume de una manera totalmente diferente, preferimos apostar por este formato, ya que creemos que los amantes de la música también lo prefieren. Tiene un valor añadido, romántico, artístico. La mayoría de nosotros utilizamos las nuevas tecnologías para escuchar música diariamente, Spotify, el iPhone, etc. En cambio seguimos comprando vinilo para disfrutar del artwork del disco, de su sonido, de pincharlo en un bar, de tocar la textura de la portada, de leer las letras del grupo…

Sobre el formato digital, lanzasteis la campaña «Pagaloquequieras» por Bandcamp en la que abríais todo vuestro catalogo para la libre descarga y que el usuario pusiera el precio que considerara oportuno. Como valoráis la experiencia. ¿Tenéis pensado repetirla?
No tengo claro que volvamos a repetir. Creo que la gente ya no está tan interesada en descargarse música y guardarla en un disco duro. Claramente creo que la música a la carta o el streaming es el caballo ganador. Además la experiencia tampoco fue muy positiva, la gente tiende a acumular y a no valorar lo que le estás dando. Así que al final acabo pensando que sí se debe pagar por la música.

El otro modo de adaptación ha sido en el musical. Predominando el punk y el hardcore en vuestras referencias, os habéis abierto a otros géneros como el mod –Brighton 64 o Los Retrovisores– o a cantantes más pop como Alberto Montero o Aries. ¿Fue premeditado o surgió de manera natural?
Todo esto surge de manera natural. Tus gustos se amplían y si ves cosas de calidad como es el caso de Alberto, no lo puedes dejar pasar. El sonido de los 60 nunca me había interesado demasiado cuando escuchaba punk, al igual que muchos otros como el garage, etc. Pero con el paso del tiempo todos estos sonidos han ido ganando su terreno y siempre he tenido relación con gente de la escena musical, en general. Así que para mí no es raro editar a Brighton 64, ya que conozco a Albert y Ricky desde hace un montón de años.

En los últimos años han proliferado en vuestro catálogo reediciones de material antiguo o inédito, caso de Los Canguros, L’Odi Social, Kangrena, H.H.H., EskorbutoTelegrama o Anti/Dogmatikss. ¿Cómo lo hacéis? ¿Os llegan las propuestas? ¿Lo buscáis vosotros?
Todas las ediciones son totalmente intencionadas. Son bandas, excepto alguna excepción como Los Canguros, que conocemos y de las que hemos sido seguidores. Tesoros que creemos que deben estar al alcance de la gente. Son nuestros cimientos.

Con motivo del aniversario habéis lanzado la colección de singles «Record Makers» -las primeras tiradas corresponden a Madee y Dulce Pájara de Juventud-. ¿Cuál ha sido la aceptación? ¿Seguirá en el tiempo o sólo durará este año?
Pues por ahora la respuesta es muy baja. Cada día cuesta más que la gente se interese por los singles de vinilo. Son un capricho caro y no acostumbran a llevar más de dos-cuatro temas. Pero es una cosa de cabezonería y satisfacción personal. Al menos este año del 25 aniversario continuaremos seguro. Acabamos de editar Joan Colomo y para el RSD tenemos uno con dos temas inéditos de The New Raemon.

Hace tres años y medio abristeis tienda física en el barrio de Gràcia donde aparte de encontrar vuestro catálogo distribuís álbumes de sellos foráneos como Sub Pop, SST, Dischord, Touch & Go, nacionales como Munster o Repetidor o locales como Bankrobber o La Castanya. ¿Cuál es el balance que hacéis de la tienda pasados estos años?
La tienda como tienda física es un desastre. Exceptuando los eventos que hacemos algún sábado con Djs, algún acústico, etc. Pasa muy poca gente. Es curioso porque viene más gente de fuera, extranjeros, que lleva la dirección en un papelito apuntada, que de aquí. Igualmente sí vendemos por correo y no dependemos de esas ventas para mantener el espacio. ya que también es nuestra oficina. Creo que mucha gente piensa que sólo tenemos discos de BCore y no es consciente de la cantidad de cosas que puede encontrar ahí. Incluso de segunda mano.

Dentro de vuestro catálogo se puede encontrar el libro que escribiste «Harto de Todo. Historia Oral del Punk en la Ciudad de Barcelona 1979-1987» (BCore, 2011). En la actualidad muchos sellos se han lanzado al mundo editorial, ¿alguna vez os habéis planteado dar continuidad por este camino al sello y editar más libros?
Por ahora no hemos trazado un plan para seguir editando libros. Es una cosa que me interesa muchísimo como consumidor. Me encantan los libros de bios de grupos, etc. Y me encantaría poder editar alguna cosa relacionada con algún artista o movimiento del que seamos «devotos». Pero, por ahora, no hay un plan trazado.

Vuestra referencia 100 fue el DVD «BCore 100» (2003) en el que se recogían vídeos de grupos del sello más un pequeño documental de Standstill. El nº 200 el libro antes mencionado. Cerca queda el 300, ya habéis pensado que hacer para celebrarlo. ¿Se puede adelantar algo?
Pues, aquí sí que me has pillado. No tenemos ningún plan. Pero siempre hacemos coincidir alguna edición especial cuando utilizamos esta referencia. Así que me pondré a pensar.

Y ya para acabar, qué nos podéis adelantar sobre vuestros planes los próximos meses.
Acabamos de editar un montón de discos. Y estamos trabajando con ellos todavía. Salvaje Montoya, Nueva Vulcano, Brighton 64, Bullitt, Joan Colomo, The New Raemon… Son muchos lanzamientos y solo estamos en abril, pero en breve estaremos con Cuello, Alberto Montero, Betunizer, etc.

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